Fuimos pioneros en explorar mezclas innovadoras de cepas provenientes de un mismo viñedo en el Valle del Maule, desafiante los límites tradicionales de la enología y buscando crear propuestas distintas y originales. Desde nuestros comienzos, hemos apostado por la experimentación y la creatividad como forma de distinguirnos en el mundo del vino, poniendo en valor la potencialidad de un terroir único y las características especiales de cada viñedo que nos inspira.

Nuestra marca, Oveja Negra, se ha consolidado a nivel mundial como un símbolo de innovación, autenticidad y estilo propio. Nos hemos posicionado como una opción diferente, que combina tradición y vanguardia, con un compromiso firme con la sustentabilidad. En cada proceso, buscamos minimizar nuestro impacto, cuidar el entorno y promover prácticas responsables, porque creemos que el buen vino también se hace respetando la tierra y las comunidades que la habitan.